En el siglo pasado el concepto de revolución pacífica surgió de un personaje que marcó al mundo como activista político y que consiguió derrotar a todo un Imperio Británico, todo ello sin la necesidad de un sólo disparo, teniendo en cuenta la historia oficial. Estoy hablando de Mahatma Gandhi, que abrió el camino a futuras generaciones a cuestionar la autoridad, a ser individuos conscientes y a no conformarse con los paradigmas que gobiernan el mundo sin cuestionarlos. Su forma de resistencia y oposición, fue la no violencia y así consiguió un antes y un después en la concepción de revolución. Pues bien, en el año 2011 tras las protestas y manifestaciones del 15 de Mayo en España y la Primavera Árabe, me decidí a abrir una página de Facebook con el título de LA REVOLUCIÓN PACÍFICA para difundir con familiares y amigos lo que estaba ocurriendo en el planeta, y en concreto en España. Mi intención era la de divulgar contenidos alternativos relacionados con la geopolítica actual que gobierna el mundo a través de sus herramientas de control como la Banca, la industria petrolífera, las guerras y fundamentalmente la televisión. La televisión es el invento que mantiene a generaciones y generaciones de familias en la más profunda ignorancia, por tanto el objetivo de LA REVOLUCIÓN PACÍFICA era el de despertar la consciencia individual ofreciendo información alternativa no presente en los mass media, controlados por megacorporaciones de la información infestados de mentiras o medias verdades. La sorpresa fue que los seguidores y el alcance de las publicaciones se fueron multiplicando en estos años, lo que me ha llevado a la idea de iniciar un blog, antes de que a Facebook le de por silenciar la página o borrar los contenidos. Resumiendo, en esta nueva etapa de la página mi objetivo es seguir exponiendo información incómoda para los gobiernos y entidades que controlan el planeta con el fin de que el despertar de la humanidad se materialice. La élite que nos domina y manipula son sólo unos pocos, una minoría de un 1%, por tanto nosotros tenemos el poder de cambiarlo con nuestra conciencia colectiva. Ya nos avisó J. F. Kennedy en su discurso antes de que lo asesinasen quién maneja los hilos del mundo: «La misma palabra secretismo es repugnante en una sociedad libre y abierta. Para los que nos oponemos en todo el mundo a una conspiración monolítica»

El primer paso para una revolución verdadera es la revolución individual. Como bien dijo una de mis mayores influencias en la vida, Henry David Thoreau, «Las cosas no cambian, nosotros cambiamos».

Un saludo y bienvenidos a la revolución del conocimiento, LA REVOLUCIÓN PACÍFICA.

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