El Instituto Ron Paul para la Paz y la Prosperidad asegura que ha ‘resuelto el enigma’ sobre los cientos de vehículos de la marca japonesa Toyota que están en manos de los milicianos del Estado Islámico (ISIS).

 Según informes de 2013 y 2014, el Departamento de Estado de EE.UU. y el Gobierno británico suministraron esos autos al Ejército Libre Sirio —que lucha contra el régimen de Bashar Al Assad— y luego pasaron a manos del grupo Estado Islámico (ISIS).

Este organismo se ha basado en dos informaciones, una ofrecida por la Radio Pública Internacional (PRI, por sus siglas en inglés) en abril de 2014, cuando indicó que Estados Unidos facilitó «43 camiones de la marca Toyota a los rebeldes sirios»; y otra que publicó el diario ‘The Independent’ en 2013, que escribió que «sin duda, el Gobierno británico también ha suministrado vehículos a los terroristas que luchan dentro de Siria».

«Gran parte de esto no es nuevo. La pregunta sigue siendo ¿por qué el Tesoro estadounidense lleva a cabo esta farsa transparente? Tal vez en Washington crean que, si son los únicos que se plantean la pregunta obvia de cómo el ISIS (Daesh en árabe) ha conseguido desplegar un gran número de tropas mecanizadas en medio del desierto sirio, nadie va a sospechar que tienen un papel en ello», plantea el analista político y columnista Tony Cartalucci.

Aviones rusos llevan a cabo operaciones contra 53 instalaciones del ISIS

Por otra parte los cazas SU-34 de la Fuerza Aérea de Rusia han destruido un importante campo de entrenamiento en la provincia de Idlib, utilizado como base para militantes procedentes de otros países. Konashénkov ha precisado que los aviones SU-24M, SU-25SM y SU-34 han llevado a cabo operaciones en las provincias sirias de Homs, Hama, Latakia, Palmira e Idlib.

«Los cazas SU-34 atacaron el campamento de militantes ubicado cerca del pueblo de Mastuma, en la provincia de Idlib. Según los datos de la inteligencia, el campamento era utilizado como puesto de recepción de los combatientes que llegaban de otros países», afirmó Konashénkov, citado por RIA Novosti. Según sus palabras, en este campo se realizaban «cursos de capacitación adicionales de los terroristas en el marco de un amplio programa de tácticas especiales (…) bajo la dirección de instructores experimentados».

En total, la Fuerza Aérea rusa ha logrado destruir siete puestos de mando, seis campos de entrenamiento y seis depósitos de municiones, así como una posición fortificada del Estado Islámico en las inmediaciones de la localidad de Salma, en la provincia de Latakia, según el Ministerio de Defensa ruso.

«La inteligencia aérea y espacial rusa continúa identificando a diario nuevos elementos de la infraestructura terrorista del Estado Islámico en el territorio de Siria para su posterior destrucción por el grupo aéreo de Rusia», dijo el portavoz del Ministerio.

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